Cómo realizar un plan estratégico para tu empresa
Un plan estratégico es un documento que recoge la manera en que una empresa va a desarrollar su estrategia en el futuro de una forma racional, meditada y organizada. En esencia, el plan estratégico es una hoja de ruta planificada que la empresa ha de abordar para ejecutar su estrategia.
No hay que confundir estrategia con plan estratégico; pues es un error bastante común. La estrategia es el camino que eliges para el logro de tus objetivos; el plan, es el diseño de la hoja de ruta de cómo recorres ese camino; ya que hay diversas formas de ejecutar una estrategia y de lograr tus objetivos empresariales.
El plan estratégico, por definición, ha de plasmarse en un documento que ha de recoger de forma meticulosa, detallada y organizada todas las fases y etapas que se han de recorrer para completarlo y para que sea útil a la organización.
Se construye pieza a pieza, como un puzzle. Al final, todas las piezas han de encajar (eso significa que está bien construido) y el resultado será el mostrar de forma muy clara de qué forma vas a ejecutar tu estrategia para lograr tus objetivos de una manera ordenada y planificada; como la propia palabra “plan” expresa.
Y ese ‘puzzle’ hay que construirlo por fases y etapas, estando cada fase apoyada en la anterior o, dicho de otra manera, no se pasa de fase hasta que se ha validado la misma; lo contrario es un error (sucede a menudo).
Las fases típicas que se utilizan para elaborar un plan estratégico son las siguientes:
FASE 1
- Fase de análisis: en esta fase se analiza el entorno general de la empresa (aspectos macro) y el entorno competitivo (aspectos micro), el sector, la evolución financiera y de sus negocios, su arquitectura organizativa, su cadena de valor, su posicionamiento competitivo, etc.; para lo que se utilizan diversos modelos estratégicos (PESTEL, 5 Fuerzas, Cadena de Valor, etc.)
FASE 2
- Fase de diagnosis: en esta fase se resumen las conclusiones obtenidas en la fase de análisis y se concluye con un modelo estratégico llamado DAFO (que identifica debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades) y que es la antesala de la selección de la estrategia. Al final de esta fase (o en una posterior intermedia) se elabora el estado deseado (que quiero ser en un futuro cercano) y se fijan los objetivos estratégicos (cualitativos y cuantitativos) que deseo lograr (crecer, mejorar la rentabilidad, profesionalizar la empresa, etc.).
FASE 3
- Fase de selección de estrategias: en esta fase se despliega la estrategia en sus tres niveles; la corporativa (en qué negocios estoy, cómo los gestiono y cómo voy a crecer), la competitiva (cómo compito en mis mercados) y la operativa (cómo voy a operativizar y ejecutar mis objetivos estratégicos a través de planes de acción). Para ello también se utilizan diversos modelos estratégicos: Ansoff, McKinsey-GE, BCG, Bowman, etc.
FASE 4
- Fase de evaluación económica de la estrategia: en esta fase se realizan proyecciones financieras (balance de situación, cuenta de resultados y estado de flujos de caja) para ver si los resultados esperados de todo tipo, la caja generada, etc., satisface las expectativas de los accionistas; porque, ¿Para qué vamos a implantar una estrategia que no satisface a la propiedad de la empresa?
FASE 5
- Fase de implantación de la estrategia: en esta fase se dispone de lo necesario para permitir a la empresa implantar la estrategia, se elaborar un cronograma de implantación de los planes de acción, se establece la arquitectura organizativa necesaria y se da el pistoletazo de salida para la implantación del plan estratégico. Ahora empieza el trabajo de verdad. Es la fase más complicada, donde más se fracasa.
Visto así es muy similar a cuando una persona va al médico: primero se hace un análisis; tras el mismo (no antes) se diagnostica; tras la diagnosis (no antes) se le da el tratamiento (selección de estrategias), tras el tratamiento (no antes) se establece el resultado esperado (evaluación económica de la estrategia) y tras dicha evaluación (no antes) se analiza el comportamiento real del paciente para ver que todo ha ido según lo previsto (implantación de la estrategia).
Lo anterior no significa que sólo las empresas “enfermas” han de elaborar un plan estratégico; es sólo un símil para un mejor entendimiento. De hecho, toda empresa que se precie debería tener un plan estratégico vigente como hoja de ruta.
Así, y en un lenguaje sencillo y entendible para todo el mundo, te hemos explicado lo que es un plan estratégico. Esperemos que te haya resultado de utilidad.
Si estás en proceso de elaboración del Plan Estratégico de tu compañía y quieres que te acompañemos en este viaje, ponte en contacto con nosotros.